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Província Eclesiástica de la Iglesia del Oriente en América

La Misión de la Iglesia del Oriente en Latinoamérica y Caribe es una Província Eclesiástica, parte escindida de la Iglesia del Oriente (Igreja Sírio-Caldaica do Oriente no Brasil), que fue fundada, de acuerdo con la tradición, por Santo Tomás, el Apóstol, en el siglo I. Ya a mediados del siglo II se habían establecido comunidades cristianas en el Imperio Parto, desde Mesopotamia hasta la India, y por todo el oriente.

Reúne a los ciudadanos de fe cristiana, para ejercer conjuntamente el derecho de libertad de conciencia y difusión de la creencia y de la práctica cristiana (ortodoxa-oriental), así como para velar por la educación moral y religiosa de sus hijos.

Somos una Comunidad Eclesiástica Autocéfala. Como Iglesia hija de la Iglesia Católica-Apostólica del Oriente, estamos canónicamente e históricamente enraizados en las tradiciones de esta venerable jurisdicción.

Nuestra Comunidad Eclesiástica, según lo mandado por el mismo Cristo, es predicar el Evangelio a “todas las gentes!, sin tener en cuenta el bagaje étnico, lingüístico, racial o cultural.

Con el fin de cumplir nuestras responsabilidades con Cristo y con el Evangelio, la gran mayoría de nuestras parroquias y misiones tienen un culto moderno.

A nivel vocacional estamos abiertos a las aspiraciones personales de cualquier individuo siempre y cuando cumplan con los requisitos académicos y espirituales y con los que se consideren canónicamente necesarios.

Es teológicamente tradicionalista, manteniendo la creencia en las Sagradas Escrituras, la enseñanzas de los Padres de la Iglesia, especialmente de la tradición oriental, las determinaciones teológicas de los Concilios Ecuménicos de la Iglesia Indivisiva (que se resumen mejor en el Credo Nicenos) y el espíritu de los Santos Cánones según su interpretación en el uso local.

Lo que creemos está expresado a través de la vida Sacramental de la Iglesia en alabanza y oración, reflejando las diferentes costumbres y devociones espirituales de los fieles Cristianos Ortodoxos-Orientales a los que servimos, siguiendo las tradiciones establecidas del Rito oriental (Rito Caldeo).

Como Iglesia dedicada a la propagación del Evangelio de nuestro Señor Jesucristo, siempre buscamos un crecimiento basado en el Espíritu.

En nuestro mundo, especialmente en nuestra cultura herética de cultura estresante, de consumismo, secularismo y de ideologías del “yo primero” que han marcado nuestra sociedad, incluyendo a las más principales denominaciones, ofrecemos la fe que nos han legado los Apóstoles.

Es una fe que requiere de la “aceptación de una trascendente autoridad moral, un acuerdo con la oración y la alabanza a nivel regular, una creencia en la verdad absoluta y la implantación de normas objetivas de conducta”.

Le invitamos a compartir y a alabar con nosotros.